Este es un libro de Virginia M. Axline, basado en el relato de las sesiones de Terapia de Juego No Directiva, de un niño de 5 años de edad cuyo nombre es Dibs.
I. Datos Generales
Como se ha mencionado anteriormente este es un niño de 5 años de edad. Era bastante retraído, no interactuaba con nadie, en el colegio se mantenía inmóvil, regularmente se quedaba sentada o incluso tirada en el piso debajo de una mesa. Algunas veces se arrastraba en el salón de clase para alejarse de sus compañeros y maestras. También mencionaban las maestras que algunas veces Dibs hacía berrinches y se comportaba de manera agresiva. En su casa con su familia Dibs tampoco tenía relación con los miembros. Regularmene no les hablaba y no se llevaba bien con su hermana menor. Por lo anteriormente mencionado este niño era reconocido por las perturbaciones que manifestaba en su conducta y todo lo relacionado.
II. Descripción de la Familia y sus miembros
El padre de Dibs era un científico famoso, era reconocido por su inteligencia y su brillantes, era lo que mencionaban las maestras del colegio de Dibs.
La madre del niño era una exitosa doctora, que se destacaba por ser de las mejores. Sin embargo ella renunció a su carrera cuando Dibs nació.
La hermana menor, Dorothy, con la cual Dibs tenía muy mala relación, estudiaba en un internado de un familiar. Las maestras del colegio mencionaban que Dorothy parecía ser una "niña mimada".
III. Antecedentes
Cuando los padres de Dibs, se enteraron que el niño iba a nacer, se sintieron muy decepcionados. Ambos padres deseaban realizarse profesionalmente y en ningún momento habian deseado tener hijos. La madre menciona que fue un embarazo difícil ya que ella estuvo enferma la mayor parte de este. El padre le hecha la culpa a la madre ya que le dice, que ella hubiera podido evitar el embarazo.
Desde el momento en que Dibs nació los padres se sintieron avergonzados de él, la madre menciona que su conducta siempre fue "rara" y los padres habian crecido en términos donde la inteligencia y los logros era lo que resaltaba. Por lo tanto, ellos no solo estaban afectado por tener un hijo, si no, porque el niño no se desenvolvia y actuaba de manera "diferente". Incluso lo llegaron a destacar como "retrasado mental", "esquizofrénico", entre otras cosas.
El niño estuvo rodeado por la ausencia de afecto por parte de sus padres y aunque las maestras del colegio trataban de prestarle atención a Dibs y trataban de acercarse a él, Dibs ya era un niño con un lenguaje limitado, rechazaba el contacto físico, presentaba reacciones violentas y se molestaba cuando invadian su espacio.
IV. Acciones y descripciones
Dibs es un niño que fue rechazado desde el momento en que iba a nacer. Fue educado por medio de gritos, ofensas y una gran falta de cariño por parte de los padres.
En las sesiones de la terapia Dibs reflejaba conflictos interpretandolos por medio de una casa de muñecas, donde representaba a los miembros de su familia. Regularmente el niño se convertía en una persona con poder y mucha fuerza para atacar al padre, que con el que aparentemente menciona en varios momentos lo siguiente: "a veces pienso que mi papá me odia". La madre y la hermana también iban incluidas en su juego, con las que aparentemente tambien se sentia disgustado
Dibs no presentaba rasgos de retraso mental, sin embargo sí parecía tener dificultad en demostrar sus emociones y poder comunicarse con los demás, lo cual indica dificultad en el manejo del contenido emocional. Por medio de la terapia de juego el niño pudo identificar su "yo" y madurar ante las experiencias de vida.
V. Curso del tratamiento
Este proceso inicia cuando las maestras del colegio deciden contactar a la terapeuta Axline, con el propósito de que Dibs mejorara y pudiera seguir estudiando en el mismo instituto. La terapeuta acepta todo lo mencionado por las maestras, las escucha y en un principio unicamente tomo sus palabras. Un día en el colegio la maestra decide tener un encuentro con Dibs, sin embargo antes de esto lo observa durante un momento en un cuarto de juegos donde estan todos los compañeros del colegio. Cuando se terminó el juego grupal la terapeuta invita a Dibs a un cuarto de juegos donde él puede hacer lo que desee.
Despues de esto Axline tiene una entrevista con la madre de Dibs dónde le comenta sobre o que desea emplear con el niño y que con su autorización llevarian a cabo 1 sesión por semana.
Cuando se comienza las sesiones de terapia de juego, Dibs no podía realizar ciertas cosas por si solo.
Dibs es un individuo con protecciones grandes
para aceptar el mundo que lo rodea, por lo que la terapeuta acepta esto,
dejando que el paciente se exprese de la forma que el desee dentro del cuarto
de juegos, tratando de no forzarlo a que proporcione información que el no
desee dar. Intenta transmitirle la confianza necesaria para el niño sienta la
libertad de expresarse como le parezca.
Al momento en que Dibs se empieza a
desenvolver con la terapeuta y a jugar, ella inicia reflejando lo que el
realiza y muestra emocionalmente. Dibs guía el camino durante las sesiones, de
lo que desea expresar y como poco a poco va desenvolviéndose y aprendiendo a
conocerse, a resolver problemas.
Durante la sesiones la madre empieza a mostrar
interés por Dibs y a buscar a la terapeuta, por lo que poco a poco se empieza a
notar un cambio del paciente y de la relación que la madre tiene con el. Así
mismo con la familia.
Con todo este proceso en cada sesión se
muestra un avance por parte de Dibs emocionalmente, regresiones y sobre todo
como el ha logrado integrar las partes de su vida que le afectan y las personas que la han marcado, todo esto
por medio del juego.
VI. Terapeutay sus técnicas
La terapeuta aborda el caso aplicando la Terapia de Juego. Brindó a Dibs un espacio en el que pudiera organizar sus ideas y emociones. Busca que durante la hora de juego Dibs tenga a oportunidad de plasmar el impacto de sus experiencias anteriores y reconstruir su mundo en un espacio pequeño, el cual puede manejar en funcion de sus necesidades.
La terapeuta logra detectar cómo Dibs tiende a recurrir al mecanismo de defensa de la intelectualización en situaciones que le generaban ansiedad. Para él era fácil acudir a explicaciones racionales e intelectuales para justificar sus acciones.
La terapia ayuda a Dibs a diferenciar sus sentimientos de sus emociones y a aprender puede tener el control sobre cualquiera de estas a pesar de que su mundo y las circunstancias cambien constantemente. La terapeuta dirige a Dibs hacia el descubrimiento de herramientas que desarrollarán en él independencia emocional y seguridad en sí mismo.
El juego no dirigido, en el que la terapeuta se abstiene de realizer juicios ni conjeturas le prove al niño la oportunidad de tener sum undo privado de significados, basándose en su integridad personal y el conocimiento de sus deseos, temores, detonantes de enojo, fuentes de alegría, etc. Los aspectos anteriores se logran unicamente a través del establecimiento de una relación adecuada entre la terapeuta y Dibs. Dicha relación toma como pilares, que la terapeuta respeta el ritmo del niño, le permite tomar la iniciativa en la estructuración de su tiempo de juego e incluso en la estructuración misma de su relación con ella.
La terapeuta pone en práctica una serie de habilidades que hacen que su trabajo sea efectivo y brinde a los padres y a Dibs resultados satisfactorios. En las sesiones de terapia tanto como en las entrevistas ha evitado hacer prejuicios, interpretaciones, explicaciones rápidas. Se enfoca en el potencial que tiene la observación dentro de un ambiente tranquila, optimista y delicada.
VI. Conclusions
Dibs, a través de comportamientosagresivos exterioriza la forma en la que procesa las repercusiones de sus dificultades.
Al inicio el ambiente escolar y familiar no propiciaban oportunidades para que Dibs explorara sus dificultades y las posibilidades alternativas para expresarse.
Al empezar la terapia de juego, empiezan a hacerse evidentes algunas mejoras. Primero a nivel intellectual para luego conseguir mejorías a nivel personal.
A través del conocimiento de sí mismo y de asumir la responsabilidad sobre sus propias emociones, pensamientos y acciones; Dibs llega a conocerse y autocontrolarse. De esta forma es que la terapia de juego no directivo se muestra efectiva para conseguir mejoras en el comportamiento de Dibs.
